Una piscina bien cuidada durante el invierno no solo te ahorrará tiempo y dinero en reparaciones, sino que también hará que la reapertura en primavera sea mucho más sencilla. En este último paso del proceso de invernaje, te comparto algunas consideraciones clave que te ayudarán a cerrar la temporada con éxito, protegiendo cada aspecto de tu piscina.
Invernaje Activo vs Invernaje Pasivo
Cuando llega el invierno, es esencial preparar la piscina para que supere la temporada fría en las mejores condiciones. Existen dos métodos principales para el invernaje: el activo y el pasivo. Cada uno tiene sus características específicas, ventajas y desventajas, y es adecuado para diferentes climas y necesidades.
- Invernaje activo: Se basa en mantener la piscina en funcionamiento durante el invierno, con una filtración mínima diaria y el uso de productos químicos para conservar el agua en buen estado.
- Invernaje pasivo: Consiste en «cerrar» la piscina, deteniendo los sistemas de filtración y utilizando productos específicos para preservar el agua sin actividad durante los meses de frío.
La siguiente tabla detalla las principales diferencias entre ambos métodos, ayudándote a elegir el más adecuado para tu piscina:
Característica | Invernaje Activo | Invernaje Pasivo |
---|---|---|
Definición | Mantener la piscina en funcionamiento con filtración mínima diaria y control químico. | Cerrar la piscina completamente, con sistemas apagados y agua estancada. |
Consumo energético | Moderado (filtración de 2-3 horas al día). | Muy bajo (sistemas apagados). |
Mantenimiento requerido | Constante: chequeos periódicos de niveles químicos y filtración. | Bajo: solo se necesita una supervisión ocasional. |
Preparación inicial | Simple: ajustes químicos y programación de filtración. | Requiere drenaje parcial, limpieza profunda y cubierta. |
Coste inicial | Bajo: solo productos químicos y mantenimiento habitual. | Moderado: productos químicos, flotadores, y posible cubierta nueva. |
Ideal para | Climas templados o cálidos (temperaturas mínimas >5 °C). | Climas fríos o con heladas frecuentes (temperaturas <5 °C). |
Riesgos asociados | Congelación del agua si las temperaturas descienden demasiado. | Acumulación de suciedad o algas si el nivel químico no es adecuado. |
Ventajas principales | Agua lista para el uso al inicio de la temporada. Menor esfuerzo de reapertura. | Ahorro energético significativo. Protección contra daños por heladas. |
Desventajas principales | Mayor consumo energético y necesidad de monitoreo constante. | Más trabajo inicial al invernar y reapertura más laboriosa. |
Productos requeridos | Cloro, algicida e invernador; sistema de filtración funcionando. | Cloro, algicida, invernador; drenaje y cubierta opaca o de seguridad. |
Duración de filtración | 2-3 horas al día. | Ninguna (sistemas apagados). |
Ubicación recomendada | Zonas con climas suaves o mediterráneos (Andalucía, Comunidad Valenciana). | Zonas de inviernos duros (Castilla y León, Aragón, Navarra). |
Inicio recomendado | Cuando la temperatura del agua baje de 15 °C. | Cuando la temperatura del agua baje de 15 °C y haya riesgo de heladas. |
¿Qué método es mejor para ti?
- Si vives en una zona templada y buscas una solución sencilla que mantenga el agua en buenas condiciones para la próxima temporada, el invernaje activo es una excelente opción.
- En regiones con inviernos severos, donde el riesgo de heladas es alto, el invernaje pasivo es más seguro y eficiente para proteger la piscina y su infraestructura.
Ambos métodos son válidos si se aplican correctamente, así que elige el que mejor se adapte a tu clima y necesidades. ¡Tu piscina te lo agradecerá!Que es
Que es el invernador para Piscinas?
El invernador es un producto químico que se utiliza para cuidar el agua de la piscina durante el invierno, cuando no se está usando. Su función principal es mantener el agua limpia y evitar problemas como las algas, la cal o que el agua se ponga verde, lo que facilita mucho el trabajo cuando llega la primavera. Básicamente, te ayuda a no tener que vaciar la piscina y a no enfrentarte a sorpresas desagradables cuando vuelvas a usarla.
De qué está hecho el invernador
El invernador tiene varios componentes que trabajan juntos para mantener el agua en buen estado:
- Algicidas: Evitan que crezcan las algas, que son las que suelen dar ese color verdoso tan poco apetecible al agua.
- Secuestrantes de cal: Estos evitan que se formen esas manchas o incrustaciones de cal en las paredes o el fondo de la piscina.
- Bactericidas: Combaten bacterias y otros microorganismos que podrían crecer en el agua estancada.
- A veces, estabilizadores de cloro: Algunos invernadores incluyen un extra para que el cloro dure más tiempo.
Todos estos ingredientes suelen venir en una fórmula equilibrada, y además, el producto suele tener un pH neutro o ligeramente ácido para no alterar el equilibrio del agua.
Para qué sirve el invernador
- Mantiene el agua limpia y clara durante todo el invierno, evitando que se estropee.
- Impide que las algas y las bacterias se reproduzcan en el agua estancada.
- Previene la acumulación de cal en las paredes y en el fondo, que es un problema bastante común.
- Protege las tuberías y el sistema de filtración de posibles atascos o incrustaciones.
- Hace que cuando llegue la primavera sea mucho más fácil volver a usar la piscina, porque no tendrás que empezar desde cero ni gastar tanto en químicos.
Cada cuánto hay que echarlo
- Normalmente, se aplica al principio del invierno, justo cuando el agua empieza a estar más fría, idealmente por debajo de los 15°C. Esto es importante porque a esa temperatura las algas y bacterias ya tienen menos actividad.
- En inviernos largos o si hay muchas lluvias que puedan diluir los productos, puede ser necesario añadir una dosis de refuerzo a mitad de temporada, más o menos cada 2 o 3 meses, dependiendo de lo que recomiende el fabricante.
¿Es suficiente con el invernador o hay que usar otros productos?
Depende del tipo de invernador que uses:
- Invernador multifunción: Si usas uno de estos, normalmente no necesitas añadir nada más. Ya incluye algicida, secuestrante de cal y, a veces, estabilizador de cloro.
- Invernador básico: Si tu invernador es más sencillo, probablemente tendrás que complementarlo con otros productos:
- Cloro lento: Mantiene la desinfección constante del agua.
- Antialgas: Ideal si tienes tendencia a problemas con algas.
- Correctores de pH: Es fundamental que el agua esté equilibrada antes de invernar la piscina.
Ventajas del invernador
- Ahorro de agua y tiempo: No tienes que vaciar la piscina, lo que también es más ecológico.
- Agua limpia todo el invierno: No tendrás que enfrentarte a un desastre en primavera.
- Protección completa: Cuida tanto el agua como las paredes, fondo y tuberías.
- Facilidad de uso: Si eliges un producto multifunción, no necesitas nada más.
¿Tiene desventajas?
- Si llueve mucho, puede diluirse y tendrás que añadir más producto.
- Algunos invernadores simples no incluyen todo lo necesario y requieren que uses productos adicionales, como cloro lento o antialgas.
En resumen, el invernador es tu mejor aliado para mantener la piscina en buen estado durante el invierno. Si eliges uno multifunción y ajustas bien el pH del agua antes de usarlo, no necesitarás nada más. Pero si optas por uno más básico, es buena idea complementarlo con cloro lento o antialgas para asegurarte de que el agua esté perfecta cuando vuelvas a usarla. ¡Y no te olvides de aplicarlo cuando el agua esté fría, por debajo de 15°C!
Limpieza exhaustiva de la piscina para Invernarla
Antes de comenzar cualquier otro paso, es fundamental que tu piscina esté completamente limpia. Esto evitará problemas como la proliferación de algas, manchas en el revestimiento o sedimentos acumulados.
- Retira los residuos superficiales: Usa una red recogehojas para eliminar hojas, insectos y cualquier resto flotante que pueda haber en la superficie del agua.
- Cepilla paredes y fondo: Utiliza un cepillo adecuado para el tipo de revestimiento de tu piscina (gresite, liner, etc.) y elimina algas, suciedad o incrustaciones que puedan haberse formado.
- Limpia con un limpiafondos: Emplea un limpiafondos manual o automático para aspirar las partículas y sedimentos depositados en el fondo. Este paso asegura que no queden residuos que puedan deteriorar la calidad del agua.
- Lava el sistema de filtración: Realiza un lavado y enjuague del filtro de arena, cartucho o diatomeas (según el que tengas). Un sistema limpio garantiza una buena circulación del agua y evita obstrucciones.
Asegúrate de que los skimmers y prefiltros estén limpios y libres de obstrucciones. Si hay acumulaciones difíciles de eliminar, considera usar productos desincrustantes o antialgas.
Realizar una limpieza meticulosa no solo preserva la integridad de la piscina, sino que también facilita los siguientes pasos del proceso de invernaje, asegurando que el agua se mantenga en condiciones óptimas hasta la próxima temporada de baño.
Ajuste de los niveles químicos del agua
Mantener el equilibrio químico es esencial para que el agua no se deteriore durante los meses de inactividad.
- Mide el pH: El nivel ideal debe estar entre 7.2 y 7.6. Usa un kit de prueba para verificarlo. Ajusta añadiendo incrementador o reductor de pH según sea necesario.
- Realiza una cloración de choque: Aplica cloro rápido (tabletas o granulado) para eliminar microorganismos. La dosis recomendada es de 10 gramos por cada metro cúbico de agua. Deja el sistema de filtración en marcha durante al menos 6 horas.
- Añade algicida: Esto previene la aparición de algas durante el invierno, sobre todo si la zona donde resides alcanza los 15º en esta temporada, ya que a partir de esta temperatura la proliferación de algas se incrementa exponencialmente.
- Usa productos invernadores: Estos productos están formulados para mantener el agua en condiciones óptimas. Sigue las instrucciones del fabricante para la dosis adecuada.
- Monitoreo regular: Aunque la piscina no esté en uso, es aconsejable verificar periódicamente los niveles químicos del agua durante el invierno, especialmente en regiones con climas variables. Esto permite realizar ajustes oportunos y evitar problemas al inicio de la temporada siguiente.
Ajusta los niveles de cloro entre 0.5 y 1 ppm y realiza monitoreos periódicos, especialmente si el invierno en tu zona tiene cambios climáticos significativos.
Ajuste del nivel del agua y protección del sistema de filtración
Preparar adecuadamente tu piscina para el invierno implica ajustar el nivel del agua y proteger el sistema de filtración para prevenir daños causados por las bajas temperaturas. Estos pasos son esenciales para mantener la integridad de la piscina y asegurar un inicio de temporada sin contratiempos.
- Baja el nivel del agua: Reduce el nivel unos 15 cm por debajo de los skimmers, este ajuste previene posibles daños en los sistemas de filtración y tuberías debido a la expansión del agua al congelarse
- Drena las tuberías: Es fundamental vaciar completamente el agua de las tuberías, bombas, filtros y otros componentes del sistema de filtración. El agua residual puede congelarse, expandirse y causar grietas o roturas en el equipo.
- Coloca dispositivos antihielo: Instala flotadores antihielo en la superficie del agua y en los skimmers para evitar daños por congelación, estos elementos absorben la presión del hielo, evitando daños en las paredes de la piscina y en los sistemas de filtración.
- Revisión periódica: Durante el invierno, inspecciona regularmente la piscina para asegurarte de que el nivel del agua se mantiene adecuado y que no hay acumulación de hielo en los componentes del sistema de filtración.
Instalación de una cubierta de invierno
Cubrir la piscina es clave para protegerla de las inclemencias del tiempo y evitar que se acumulen suciedad o residuos.
Beneficios de utilizar una cubierta de invierno:
- Reducción de la evaporación: Al cubrir la piscina, se minimiza la pérdida de agua por evaporación.
- Disminución del uso de productos químicos: Una cubierta adecuada puede reducir hasta en un 75% la necesidad de productos químicos, ya que impide la entrada de suciedad y la proliferación de algas.
- Ahorro energético: Al mantener la temperatura del agua, especialmente durante la noche, se reduce el tiempo de filtrado hasta en un 60%, lo que prolonga la vida útil del sistema de filtración y ahorra energía.
Tipos de cubiertas:
- Cubiertas opacas: Impiden el paso de la luz solar y previenen la formación de algas.
- Cubiertas filtrantes: Retienen hojas y residuos, pero permiten el paso del agua de lluvia.
- Cubiertas de seguridad: Diseñadas para evitar accidentes, soportan peso humano.
Pasos para instalarla:
- Mide la piscina para asegurarte de que la cubierta se ajuste perfectamente.
- Extiende la cubierta sobre la superficie, asegurándote de que cubra bien los bordes.
- Fíjala utilizando tensores, gomas o sistemas de anclaje específicos.
La instalación de una cubierta de invierno no solo protege tu piscina de las inclemencias del tiempo, sino que también facilita su mantenimiento y prolonga la vida útil de sus componentes.
Supervisión periódica durante el invierno
Aunque la piscina no esté en uso, es importante revisarla de vez en cuando para evitar problemas.
- Revisa la cubierta: Asegúrate de que esté bien colocada y limpia de acumulaciones de agua, hojas o nieve.
- Revisión de anclajes: Verifica regularmente que los sistemas de sujeción estén en buen estado y ajustados correctamente para garantizar la seguridad y eficacia de la cubierta.
- Controla el nivel del agua: Asegúrate de que el nivel del agua se mantenga adecuado, compensando pérdidas por evaporación o filtraciones. Un nivel de agua incorrecto puede afectar la estructura de la piscina y el funcionamiento de los sistemas de filtración.
- Monitorea los parámetros químicos: Cada 3-5 semanas, mide el pH y los niveles de cloro mantener el equilibrio químico previene la proliferación de algas y bacterias
Consejos adicionales para un invernaje efectivo
Además de los pasos fundamentales para preparar tu piscina para el invierno, considera las siguientes recomendaciones para garantizar una conservación óptima y facilitar su reactivación en la próxima temporada:
- Evita sulfato de cobre: En piscinas de gresite, este químico puede causar daños al revestimiento.
- Protege contra heladas extremas: Instala flotadores diagonales para absorber la presión del hielo, estos dispositivos absorben la presión del hielo, evitando daños en las paredes de la piscina.
- Mantén registros: Documenta fechas, productos usados y ajustes realizados para futuras referencias.
- Aplicación de productos invernadores específicos: Utiliza productos de invernaje adecuados al tipo de revestimiento de tu piscina. Por ejemplo, para piscinas de gresite, es recomendable evitar invernadores que contengan sulfato de cobre, ya que pueden dañar el revestimiento.
- Mantenimiento de equipos y accesorios: Retira y almacena en un lugar seco y protegido del frío los equipos y accesorios desmontables, como escaleras, duchas y limpiafondos automáticos. Esto previene daños por las bajas temperaturas y prolonga su vida útil.
Consideraciones finales
El momento ideal para empezar el invernaje es cuando la temperatura del agua está por debajo de 15 °C. Antes de cerrar, asegúrate de que todo está en buen estado, desde los equipos hasta los productos químicos utilizados. Una buena preparación te ahorrará problemas y hará que la próxima temporada comience sin contratiempos.
Conclusión: Cuidar tu piscina durante el invierno no es complicado si sigues un plan detallado. Dedica tiempo a realizar cada paso con precisión, y tu piscina estará lista para disfrutarla nuevamente cuando llegue el calor. ¡Un buen invernaje es la clave para una piscina duradera y saludable!
1 comentario en “Cómo Invernar una Piscina”
Con antialgas solo se puede invernar