Guia de lo que no debes hacer en la piscina
Mitos, Errores Comunes y Prohibiciones Absolutas
Los Grandes Mitos del Mantenimiento
El «olor a cloro» es señal de limpieza
¡Todo lo contrario! Ese olor fuerte significa que tienes cloraminas, que se forman cuando el cloro reacciona con sudor y suciedad. Una piscina bien cuidada apenas huele. Si apesta, necesita un tratamiento de choque.
Un tratamiento de «shock» lo arregla todo
El shock de cloro es una herramienta potente, pero no una varita mágica. Sirve para oxidar contaminantes, no para corregir el pH, la alcalinidad o problemas de filtración. Usarlo indiscriminadamente es un desperdicio de dinero.
Si el agua está cristalina, está perfecta
Un agua clara puede ocultar un pH peligrosamente alto o bajo. Sin un pH correcto (7.2-7.6), el cloro es ineficaz, irrita la piel y los ojos, y daña los equipos de la piscina.
El alguicida es la solución mágica para el agua verde
El alguicida es principalmente preventivo. Si tu piscina ya está verde, el problema es falta de cloro y un desequilibrio químico. Usar alguicida en este punto es como poner una tirita en una herida grave.
Vaciar la piscina cada año es una buena práctica
¡Peligrosísimo y caro! El agua contrarresta la presión de la tierra. Vaciarla puede provocar grietas estructurales o que la piscina literalmente «flote» y se salga de su sitio. No se debe vaciar salvo para reparaciones mayores.
Los pañales de agua son 100% impermeables
Uno de los mitos más peligrosos. Los pañales de piscina contienen sólidos, pero NO son impermeables a líquidos. Orina y heces líquidas pueden filtrarse, contaminando el agua con parásitos resistentes al cloro como el Cryptosporidium.
Errores que Dañan tu Piscina y tu Salud
Ignorar el pH (El error más común)
Obsesionarse con el cloro e ignorar el pH es un error de principiante. El pH es el jefe: si no está en su rango, el cloro no funciona. Es la causa número uno de irritación de ojos y piel, por encima del propio cloro.
Poner las pastillas de cloro en el skimmer
Es cómodo, pero terrible para tu instalación. Cuando la bomba se para, el agua en el skimmer se vuelve extremadamente ácida y corrosiva, dañando las tuberías y los componentes de la bomba. Usa siempre un dosificador flotante.
Limpiar el filtro con alta presión
Usar una hidrolimpiadora tipo Kärcher en un filtro de cartucho destroza sus láminas internas, dejándolo inservible. Se limpia con una manguera a baja presión y, si es necesario, un producto desengrasante específico.
Aspirar una invasión de algas hacia el filtro
Cuando la piscina está muy verde, aspirar al filtro solo lo satura y redistribuye las esporas de algas. En estos casos, se debe aspirar poniendo la válvula selectora en la posición de «desagüe» (waste), tirando el agua sucia fuera.
No ducharse antes de entrar
La ducha previa elimina restos de cremas, sudor y desodorante. Sin ella, estos compuestos reaccionan con el cloro, gastándolo inútilmente y creando las molestas cloraminas.
Usar la piscina como baño
Parece obvio, pero el ácido úrico de la orina reacciona con el cloro para formar compuestos muy irritantes. Cada «accidente» consume una cantidad enorme de desinfectante y es un foco de problemas.
Ducharse con jabón justo antes de entrar
Paradójicamente, el jabón introduce tensioactivos en el agua que pueden generar espuma y consumen cloro de forma innecesaria. Una ducha rápida solo con agua es lo ideal.
Bañarse con heridas abiertas
Una herida abierta es una puerta de entrada para bacterias presentes en el agua y, a su vez, una forma de contaminar la piscina. Es mejor evitar el baño hasta que la herida esté bien cicatrizada.
Prohibiciones Absolutas y Peligros Mortales
Mezclar productos químicos
¡PELIGRO MORTAL! Nunca mezcles diferentes productos, especialmente cloro con ácido (reductor de pH). La reacción genera un gas de cloro tóxico que puede ser letal si se inhala en un espacio poco ventilado.
Jugar con la succión (Sumideros y Boquillas)
La succión de sumideros y boquillas de limpiafondos es extremadamente potente y puede atrapar el pelo, las extremidades o el cuerpo de una persona. La boquilla del limpiafondos, si se deja abierta, es especialmente peligrosa. Siempre debe estar cerrada o con su tapa de seguridad puesta.
Añadir químicos con gente en el agua
Jamás. Una concentración de producto químico antes de disolverse puede causar quemaduras químicas graves en la piel y los ojos de los bañistas. Saca a todos, añade el producto y espera al menos 30-60 minutos con la bomba en marcha.
Usar productos de limpieza domésticos
Lejía, bicarbonato de cocina o vinagre no están formulados para piscinas. Pueden causar reacciones químicas impredecibles, dañar el revestimiento y desequilibrar el agua de formas difíciles de corregir.
Dejar la bomba funcionando en seco
Si el nivel del agua baja por debajo del skimmer, la bomba aspirará aire. Esto la sobrecalentará y quemará su sello mecánico en cuestión de minutos. Es una de las averías más caras y fáciles de evitar.
Bañarse durante una tormenta eléctrica
El agua es un excelente conductor de la electricidad. Una piscina es un objetivo perfecto para un rayo. Al primer trueno, todo el mundo fuera del agua y lejos de ella.
Usar objetos de vidrio en el área de la piscina
Un vaso roto es una pesadilla. Los trozos de cristal son prácticamente invisibles bajo el agua y un peligro enorme. Utiliza siempre plástico o materiales irrompibles.
Usar calefacción eléctrica improvisada
Intentar calentar el agua con métodos caseros es una receta para la electrocución. Utiliza únicamente calentadores homologados y diseñados específicamente para piscinas.
Tu piscina es un ecosistema que requiere conocimiento y respeto. Evitando estos mitos, errores y prohibiciones, no solo ahorrarás dinero y problemas, sino que garantizarás un entorno seguro y saludable para disfrutar del verano. La seguridad nunca es negociable.